Y con esta última entrada en el
blog finalizamos la práctica para la asignatura ‘Comunicación Audiovisual y
Cambio Social’. Teniendo en cuenta que no tengo ganas de comerme mucho la
cabeza con este último comentario, ni siquiera para escribir pseudofilosofía barata o lecciones de moral encubierta, me limitaré a realizar una
breve conclusión acerca de mi percepción general sobre esta práctica que es bien
diferente del resto que tenemos.
En primer lugar tod@s sabemos que
como Agustín era quien iba a impartir esta asignatura, y en consecuencia, las
prácticas, pues lógicamente esperábamos que fueran llevaderas con respecto a
otras de investigación bastante tediosas. A mi particularmente no me ha
supuesto un esfuerzo considerable el tener que escribir un máximo de 500
palabras (incluso en más de una ocasión he rebasado dicho límite), aunque hay
opiniones de todos los gustos.
Obviamente este nuevo aire que ha
tomado la práctica nos ha venido bien, tanto para conocernos un poco más entre
nosotr@s a través de las palabras, como para tomar conciencia de que las nuevas
plataformas sociales y digitales están a la orden del día. Y me remito
precisamente a ello porque much@s compañeros se quejaban de que tuvieran que
hacer un blog para esta asignatura, “no tiene sentido” argumentaban… pues yo sí
se lo encuentro y además con algunos fundamentos. De primeras el nombre de la
asignatura te lo dice todo. Se trata de nuevos cambios sociales que han surgido
de lo audiovisual, y esto lógicamente nos afecta a nosotr@s como usuarios que
interactúan con otros individuos, hablo de nuevas formas de comunicación y
relación con otr@s. El tema del diario
audiovisual y las respectivas explicaciones del profesor sirven para apoyar la
idea que quiero transmitir, una idea personal que no deja ser más que un punto
de apoyo para equilibrar un poco la balanza de cosas positivas y negativas que
ha tenido esta práctica (por lo menos es algo diferente, por lo menos...)
En definitiva, sí tiene sentido el que hayamos hablado de
cine, de TV, de nosotr@s, de los otr@s, del aire que se respira o de las imperfecciones y virtudes de la UMA a
través de un blog. De hecho yo no sé vosotr@s, pero a mí me ha aportado lo
suficiente como para replantearme ciertas cosas al respecto.
The Dopplengänger.
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